Packaging personalizado para una boda diferente.

Fotografía © Sara Lobla

Seguramente ya sabes que nos encanta trabajar con las manos. Dibujar, recortar, empaquetar y, cómo no, realizar packaging (cajitas y envoltorios)… así que cuando nos llega algún proyecto en el que tenemos que crear una caja para y nos dan libertad total, no podemos sino comenzar a darle vueltas al proyecto una y otra vez para conseguir una solución lo más atractiva posible.

En este caso nos contactó Belén para que realizásemos una caja para incluir las fotos de su boda  y recordar un momento tan especial en un packaging tan diferente como su boda y quería también esa misma caja para enviársela a una revista de moda para presentarles su vestido de novia.

La boda se iba a celebrar en Brasil, en la playa, y con muy poquitos asistentes. Iba a recrear ese ambiente playero pero desenfadado, tropical y único que te permite hacer una boda original y única.

Belén (para quien ya realizamos un trabajo previo para su marca de vestidos de novia Beba’s Closet), tenía claro que quería que fuese una caja, pero no tenía mucha más información que aportarnos salvo un “haced lo que queráis, confianza plena”. Y esas palabras son, por un lado una alegría inmensa, pero por otro una responsabilidad enorme ya que los únicos responsables de cómo queda el proyecto somos nosotros…

Así que empezamos a pensar en cómo hacerlo para, por un lado, cumplir plazos y presupuesto; y por otro lado que fuese una caja inolvidable y única.

Sabiendo que quería que fuese una caja que cada vez que la abriese recordara el momento con tanto cariño como el que puso en su celebración.

Así nos pusimos a pensar en el entorno, el tipo de evento, en sus vestidos… y tuvimos claro desde el principio que la caja tenía que llevar flores de alguna forma…

Así que pensamos en un principio en crear unas ilustraciones, crear un “pattern” y forrar la caja con esas flores… pero nos faltaba algo.

Kata hacía tiempo que estaba practicando con la creación de flores de papel, así que nos dijimos: ¿Y si incluimos en la caja un pequeño jardín con flores en papel?. Y esa fue la idea que desencaminó en el proyecto que tienes delante.

Una vez tuvimos claro que iba a incorporar flores realizadas a mano con papel, pensamos que la forma también era importante.

Darle a la caja una forma de “sombrerera” nos parecía lo más acertado ya que la forma no es demasiado común y la sorprendería con la forma inicial.

Seguro que piensas que compramos una sombrerera y la “modificamos” para crear nuestra caja… pero no, una lástima que no tengamos fotografías del proceso, pero la caja está creada desde cero, con cartón pluma y con papel, posteriormente todo forrado con ese papel de “estrellitas” que ves…

El proceso fue bastante complicado porque había que crear la caja tomando medidas para que todo encajara perfectamente, no se moviese nada, y pudiese cerrarse y abrirse con facilidad.

Los pasos fueron:

1. Creación de la caja (Compra de material, pruebas de tamaños, ensayo error de formas…)
2. Creación de espacios para “jardín” y “hueco para fotos”
3. Creación de las flores a mano
4. Ajuste del “jardín” y cierre con cinta

Los tamaños estaban ajustados al máximo para que cada elemento encajara perfectamente sin aplastar las flores, manteniendo el peso de la caja para que se mantuviese en horizontal y el sobre con las tarjetas encajado en su sitio.

Es un proyecto irrepetible que nos encantó realizar, con muchísimo esfuerzo y trabajo, pero con un resultado del que estamos especialmente orgullosos.

Gracias Sara Lobla por las fotos! (las de la caja ya terminada y empaquetada).

Ojalá te guste, aunque tal vez habrías preferido otra forma, flores… anímate a comentárnoslo en los comentarios, que nos encanta saber tu opinión!